GUANTES PARA FARMACIAS

GUANTES PARA FARMACIAS

Los guantes para farmacias son un elemento de protección indispensable para los técnicos farmacéuticos. Además de las mamparas y la necesidad de mantener la distancia de seguridad con los clientes, los guantes representan la barrera más efectiva para prevenir posibles contagios.

Tipos de guantes para farmacias

En Guanta te ofrecemos guantes para farmacias de varios tipos, especialmente diseñados para garantizar la seguridad de tus empleados, colaboradores y clientes.

Guantes de nitrilo azul sin polvo

Los guantes de nitrilo están fabricados a partir de caucho de nitrilo-butadieno. Sus características los hacen muy resistentes al contacto con agentes biológicos y productos químicos.

El caucho sintético y la ausencia de polvo hacen que los guantes de nitrilo azul sean muy apreciados por los técnicos farmacéuticos. Son muy suaves al tacto y protegen contra alergias e irritaciones, algo fundamental cuando se trata de profesionales alérgicos al látex.

Guantes de vinilo sin polvo

Los guantes para farmacias de vinilo sin polvo son otra gran alternativa a los tradicionales guantes de látex. Están diseñados para tareas e intervenciones cortas, su precio es mucho más económico que el de los guantes de nitrilo, y garantizan una buena protección para personas con las manos delicadas.

Guantes de nitrilo Rubbergold

Los guantes de nitrilo Rubbergold se han convertido en uno de los tipos de guantes más demandados en la industria farmacéutica por el alto nivel de asepsia que garantizan.

Su proceso de fabricación y empaquetado se realiza de forma automática en un ambiente controlado, y están preparados para que el profesional pueda extraerlos de forma individual sin entrar en contacto con el resto de unidades.

Además, cumple con la normativa ISO 374-5:2016, que garantiza su resistencia a agentes como bacterias, hongos y virus.

Guantes de látex con o sin polvo

Los guantes de látex siguen siendo una de las soluciones más eficaces para los profesionales del sector sanitario. Su extrema elasticidad, la facilidad para colocarlos y ajustarlos, o la suavidad de su tacto, hacen que sean ideales para trabajar.

Es cierto que los guantes de látex con polvo aportan un extra de comodidad y protección contra la humedad interna generada por la sudoración, pero algunas personas son alérgicas a estas sustancias, por lo que siempre es recomendable contar con existencias suficientes de los dos tipos.

Cómo utilizar los guantes para farmacias

Lo primero que hay que tener en cuenta a la hora de utilizar guantes para farmacias es la elección de la talla. Deben poder colocarse con facilidad y quedar perfectamente ajustados a las manos.

Otro aspecto fundamental, sobre todo en esta época de alerta sanitaria, es evitar el contacto de los guantes con la boca, la nariz y los ojos, principales vías de acceso de los virus en el organismo.

También es importante una higiene de manos correcta, tanto antes de su colocación como después de su retirada. Es conveniente sustituir los guantes cada vez que se entre en contacto con un cliente o compañero de trabajo. Cada sustitución vendrá acompañada de una nueva limpieza y desinfección de manos.